Tú y yo somos energía recurrente. No existe mayor magia que cuando tú alma y la mía se juntan. Somos carne, somos luz, somos un solo latir. cuando tu boca se acerca a la mía y te respiro eres vida. Si, vida de mi vida. Estar contigo es poder ser, crear, soñar. Tocarte es trazar las coordenadas al tesoro más valioso que en el mundo encontré. Besarte es dejarte abrir la caja de Pandora que son mis instintos. Es entregarme a ti muriendo de ganas porque nunca me sueltes. Porque al tenerte tan dentro te siento tan mío. Solo mío! Hacer el amor contigo siendo prohibido es desatar una guerra sintiéndome tan en paz conmigo. Porque en medio del caos, los obstáculos y la guerra que se desata. Mi mejor escudo es el amor y mi única arma es la verdad.
tu sonrisa contagiosa, con tu talento creativo siempre pintas mis días grises, con un arcoíris brillante de alegría. Tan callado y perceptivo.
Tu,
que me miras y me descubres, me deshojas el alma con tus miradas.
Tu,
Que llegaste tan misterioso y tímido.
Tu,
mi rueda de la fortuna que siempre gira a mi favor.
Tu,
que detienes el tiempo para que no pase tan rápido cuando compartimos historias.
Tu,
que me comprendes sin tener que explicarme.
Tu,
que con cada copa que vaciamos de vino me llenas la vida.
Tú,
ese algo que no se como nombrarlo, pero que se siente tan intenso.
Tú,
mi verbo, me adjetivo, mi sustantivo.
Tú,
que conoces el lugar donde mi corazón se parte y haces malabares para no pisar donde duele.
Tú,
al que le confesé mi mayor error, y me proclamaste aún más humana.
Tú,
que haz ido conociendo mis defectos y te sigo pareciendo perfecta.
Tu,
que me haz abrazado fuerte cuando sentía que la vida se me partía en mil pedazos.
Tú,
siempre tú! mi ángel guardián, mi confidente fiel. Tu,
que te encanta armar este complejo rompecabezas que soy.
Si, tú.
A ti te extrañaría aunque no te hubiera conocido, porque en cualquier época o momento que estás presente te conviertes en eso que necesito.
Tú,
que me miras aún cuando cierro mis ojos.
Tú,
que te quedas aún cuando te digo que te quiero, y tomo la dirección opuesta.
Tú,
que me quieres un lunes y jamás te olvidas de mi los viernes.
Tú,
que te empeñas en habitar cada rincón inhóspito de mi ser.
Tú,
mi caballero elegante revestido de paciencia, con tu espada de verdad y tu escudo de amor. Nunca te alejes, porque en tus ojos encuentro mi valor. Me haz enseñado a verme como me vez tú. Y por primera vez me siento suficiente, Completa.
Tu
por siempre mi amigo confidente mi alma gemela que nunca será mi amante pero siempre mi hermano.
Quiero que seas tú, siempre tú… Mi cuento de buenas noches, y el acompañante perfecto de mi café todas las mañanas. Que sean tus besos el aliento de todos mis días, y nuestro amor el motor de nuestras vidas. Quiero que nuestras ganas de ser y de estar nos duren tanto como la vida.
Quiero que rompamos los kilómetros que les gusta vernos lejos. Esta noche quiero proclamarme fuego, ese en el que amas arder. Vamos a juntarnos y que tus labios en mis pechos marquen el comienzo de la trayectoria que abre el paraíso entre mis piernas. Ven vamos a recorrernos, quiero que te profundices poco a poco en mi cuerpo. Explora despacio todas esas zonas erógenas que mientras las descubres hacen que me enamore un poco más. Así quiero que sigas haciendo que desee las huellas de tu cuerpo sobre el mío. Hasta que en un súbito escalofrío y un gemido se contraigan todo nuestro cuerpo mientras te apretó fuerte para que no te salgas y al acabar la faena te quedes allí agotado con tu cuerpo sobre el mío. Con el corazón a mil y las ganas de volver a comenzar otra vez.
Estar contigo es no querer que la noche se acabe cuando estoy durmiendo a tu lado. Es mirar el reloj en la madrugada y querer congelar los segundos solo para abrazarte un tiempo más. Es pedirle al cielo que no den las 5:30 y te tengas que marchar.
Ya no quiero ser un pasaje en la vida de nadie, quiero algo sincero y tangible. Quiero amar y que lo único que ese amor rompa sean los esquemas. Quiero que al llegar la noche el amor sea el remedio o la cereza de mis días. No quiero pensar más en amores imposibles ni tener que compartir esa morada con nadie. Añoro un amor equitativo, una relación estable, fuerte, y con futuro. Anhelo compartir sueños y construir realidades. Un amor valiente, un amor real, eterno.
No es la distancia el abismo entre tú y yo. No es el tiempo el que separa nuestro futuro. Ni son los cuerpos con los que en un pasado elegimos curar nuestras soledades lo que se oponen a un nosotros sin excusas. Lo que nos separa somos nosotros, tú y yo. Nuestros miedos a intentarlo de verdad. Quizá por temor a perder lo que ayer construimos con tanto esfuerzo. Yo salte al vacío en un paso de fe, y un paracaídas de esperanza. Y me he quedado al fondo viéndote de lejos sin saber que hacer. No, no nos separa las circunstancias nos separan la falta de decisión. A ti el quedarte allí a la orilla sin saber si saltar hacia a mi, o regresar a tu camino. Y a mi el seguir hundida en este vacío y no buscar un camino nuevo con la esperanza de que un día me caigas del cielo y aterrices en mis brazos, y seas la lluvia que acabe esta sequía de necesitarte tanto. Si, no son las circunstancias ni las personas lo qué hay entre tú y yo, somos nosotros incapaces de amar de verdad o dejarnos ir para siempre.
Amar es… saber que es casi imposible, pero seguir intentándolo. Es extrañarte todos lo días y no poder tenerte siempre. Amar es saber que la distancia siempre va ser la excusa perfecta para aplazar acciones, sembrando esperanzas inútiles. Porque amar es reconocer que no siempre se obtiene lo que se da. Amar es muchas veces soltar y marcharse decir adiós para toda la vida aun sabiendo que toda la vida uno va seguir amando.
Hoy voy a contarte una historia. Una historia de amor infinito, una historia de amor corto que dura una eternidad. Ella no sabía qué tipo de amor era El, si era el amor de su vida, o era el amor verdugo de su alma. Ella veía en el lo más puro, la entrega total de dos seres que desde el primer momento que cruzaron miradas se dieron cuenta que habían encontrado el hogar de su corazón. El la amaba tanto que no le importaba el mundo, él estaba dispuesto si era necesario a construir uno solo para los dos. El para ella era su refugio, su calma. El único hombre capaz de ver sus demonios y coexistir con ellos. El amaba su libertad, su espíritu aventurero, su valor. Ella amaba su calidez, su mirada, esa mirada de sol que hacía desaparecer sus días grises. Ellos se amaban a pesar de los obstáculos, a pesar del tiempo, de las heridas causadas por ser tan diferentes. Ellos se amaban porque en el mundo entero no había alguien que los hiciera sentir tan completos como cuando estaban juntos. Ellos se amaban porque de las mil razones que existían para decirse adiós, existía una más grande que todas, el fuego que surge entre amantes, esa llama inapagable que llaman amor. Porque a pesar de haber probado otras bocas y acariciado otros cuerpos, ninguno había sido capaz de borrar esas huellas que ambos habían marcado en sus cuerpos. Ellos estaban dentro el uno del otro, eran la sangre que corría por sus venas. Eran almas gemelas, y no porque fueran iguales sino porque se complementaban. Pero el destino les tenía una prueba y era que no importaba cuanto lucharán siempre habría algo que los separará. Aunque ambos sabían que eran el uno para el otro, su amor era un sacrilegio. Pero entre sueños rotos y promesas incumplidas, ellos juraron amarse, amarse toda una eternidad porque estaban seguros que si no sería en esta vida sería en otra, quizá con labios distintos y cuerpos extraños, pero con el mismo amor, el mismo fuego, y las mismas miradas. Porque era su sueño, porque nunca dos almas se cruzan y se reconocen la una a la otra y se funden dándose cuenta que an encontrado su hogar. Y eso no lo rompe el destino, no lo separara la distancia, ni lo borra el tiempo. Ellos sabían que la fuerza de ese amor fugaz pero infinito, los haría reencontrarse otra vez.
Quiero despejarte las dudas, y que sepas todo aquello que he callado esas cosas que nunca te he dicho. Como que te amo y nunca imagine una vida sin ti. Que todavía sueño con realizar todo aquello que un día soñamos juntos. Quiero decirte que a pesar de las heridas nunca he podido siquiera guardarte rencor, porque siempre me a valido más todo lo bueno que me as dado que las cosas malas que nos an separado. Quiero que sepas que si muchas veces me alejo y callo no es porque no te ame si no porque no quiero enjaularte, yo quiero que seas libre y que vueles tan alto como desees, quiero verte en la cima feliz de tus triunfos,que verte atado mi lado sintiéndote incompleto porque se lo mucho que significan tus hijos y Porque yo no conozco otra forma de amar, yo no puedo ser egoísta con quien amo. Quiero que sepas que mis mejores noches an sido a tu lado, que no me he sentido más plena que cuando al amanecer me giro de lado y te encuentro a un costado. sé que aveces me comporto indiferente, pero tengo miedo de pedir más de lo que puedas dar. El amor nunca para mí a sido un sacrificio, más bien una entrega total voluntaria. Yo no creo en ataduras. Yo creo en personas que se aman y están dispuestos a vivir los riesgos del amor. personas que no tienen miedo a ser rotas, personas que creen que la felicidad se encuentra solamente cuando estás con quien amas y haces lo que amas. Cuando decidí estar a tu lado lo hice consiente de que somos diferentes, que todo estaba en contra, pero me apasionan los desafíos, y me encantan tus besos, amo tu forma de acariciarme, amo tu forma de amarme. Y si, lo sabía qué no sería fácil tenerte de a ratos, sabía que te iba extrañar un mundo, que sería agónico verte partir y esperar que regreses. Pero no me importa porque en la vida al igual que en el amor se que las mejores cosas toman tiempo y paciencia, y yo te esperare cuanto sea necesario; mientras tu decidas seguir volviendo a este hueco en mis brazos que lleva tu nombre. En la vida nada es fácil mi amor en el amor tampoco! Pero yo decidí vivir, yo decido amarte.